La pasión de la mujer cananea.

Mateo 15:21-28

Historia de Jesús con una mujer cananea.

Era tanta su desesperación por lo que ocurría con su hija que ella se encontraba completamente mentalizada a este hombre -que había expandido su fama por toda la región sanando enfermos, que iba a ayudar a su hija.

Componente en la vida de esta mujer digno de admirar: su pasión

Cómo y de qué forma debe actuar en nosotros la pasión.

Mateo 15:28

¿Se puede estar comprometido sin estar apasionado?

Sí se puede, puedes estar comprometido con algo, cumplir con ciertas obligaciones pero hacerlo sin pasión, hacerlo simplemente porque hay que hacerlo, incluso por rutina. Como por ejemplo asistir y servir en la Iglesia.

Respecto a la mujer cananea, si ella solo hubiese estado comprometida con conseguir que Jesús sanase a su hija, lo más probable es que no lo consiguiera, porque fue gracias a sus gritos y pasión que ella puso para que el Señor la escuchara y así su fe sanó a su hija.

Mayor ejemplo de pasión: Jesús

Filipenses 2:5

Jesús es el mayor ejemplo de pasión por el hecho de venir a este mundo a morir por los pecados de todos ustedes.

Jesús tuvo toda la humildad para cumplir lo ordenado por el padre.

Sumen pasión a su compromiso en su relación con Dios y con la iglesia.

¿Cómo lograrlo?

Comprométanse a conocer más a Dios, esto a través de Su palabra y la pasión por conocerlo aumentará cada vez más. Dejen de lado la rutina de hacer las cosas de la iglesia simplemente por hacerlas. Apasiónense por servir en la obra, así podrán lograr un impacto en la vida de las demás personas.

A los compromisos debemos sumarle verdadera pasión por el Señor para que perduren.

1a Corintios 11:1

Deben imitar su pasión, porque el problema de estar comprometidos sin estar apasionados por las cosas del Señor es que ese compromiso puede durar muy poco.

Debemos apasionarnos por las cosas correctas.

Más pasión por su obra y menos por las pasiones juveniles

2a Timoteo 2:22

Observen donde está su pasión.

Sean más comprometidos y apasionados por los mandamientos del Señor.