Las acciones están cimentadas en lo que tú crees, creencias. Tú te comportas de acuerdo a las creencias que tienes, esas creencias se transforman en valores para ti, en convicciones. Y te comportas según cuáles sean tus convicciones.
Lo que se ve es producto de las creencias y valores que tú tienes.
Nunca llegarás a ser luz si no te convences que lo eres por medio de la Palabra de Dios.
Nunca podrás servir a Dios si no hay una base en tu vida de creer en lo que la Palabra de Dios dice, después convencerte de eso para luego mostrarlo a los demás. Por ello es importante que leas la Biblia, porque si no la lees jamás creerás lo que Ella dice. Es importante que tengas una relación con Dios, sino jamás harás lo que la Biblia dice.
Tus acciones son la parte visible, el reflejo de lo que son tus convicciones.